sábado, 3 de abril de 2010

MAÑANA SAN PERÓN

                  Juan Yáñez

                    Fue la época del populismo mas exacerbado que existió en la Argentina y que aún se le encuentra, aunque ya bastante más devaluado. Asimismo, las hábiles  técnicas que dieron sus buenos frutos al carismático líder, fueron aprovechadas por aquellos que escamotearon su herencia y que las remozaron dándole un baño de caramelo, para ocultarle lo rancio y con la segunda intención de atraer a los golosos.


Antes de seguir es oportuno, -solo para aquellos que lo han olvidado o lo ignoran- aclarar el significado de San Perón. Y era que cuando, en alguna reunión, mitin, concentración, o cuálquier espéctaculo  al que asistía Perón, se prolongaba en demasía, --generalmente por la noche-- el público presente de manera colectiva y concluyente, clamaba a coro, y repetidamente hasta el cansancio, el consabido:

   ¡¡¡ Mañana San Perón..., mañana San Perón..., mañana San Perón.........!!!
 Con esta táctica se obligaba al líder a decretar el siguiente día, feriado y de esa forma no asistir a al trabajo, o estudios o cualquiera otra obligación puntual.

Por supuesto, Perón, como buen demagogo, era el más interesado en hacer este tipo de concesiones y después de hacerse rogar el tiempo que fuera necesario concedía la moción.

Sería por 1953 ó 1954 y no llegaba a los 14 años de edad,  cuando cursaba mis estudios en la Escuela Normal Mariano Acosta en Buenos Aires y allí nos regalaron unas entradas, que repartió el gobierno en los colegios secundarios, para ver nada menos que a los  Harlem Globettroters, −el famoso el equipo norteamericano de basketbol−, y en el lugar más emblemático para presenciar un espectáculo deportivo de esa categoría: El Luna Park.

Allí fuimos, nos ubicamos con el mayor entusiasmo en las repletas tribunas. El espectáculo estaba programado para comenzar a primera hora de la noche, pero por causas que desconocíamos se demoraba exageradamente. ¿Por qué sería?, preguntarán ustedes amables lectores, de la misma manera que impacientes nos preguntabamos nosotros en aquella noche......,
....... −bueno, había que esperar que llegara Perón.....,

que era el más importante asistente y por otra parte el general se consideraba a sí mismo, el principal protagonista del espectáculo y quizás lo fuera…, −vaya uno a saber…!!!

Lo que sí era seguro y sin lugar a la menor duda: El dueño y a la vez el principal payaso del circo



Llegó pasada las diez de la noche, sonriendo y levantando los brazos como lo hacía siempre y comenzó la función. Esos negros eran maravillosos, hacían y deshacían con el balón las piruetas más geniales, demostrando que más que un deporte era una exhibición circense. Ya habían pasado las doce y el juego seguía y el entusiasmo de todos crecía….., pero yo, pensando que mañana había que ir al colegio y que mis padres estarían preocupados por lo tarde de la hora decidí irme a casa.



Al otro día estaba temprano en la escuela con otros compañeros madrugadores esperando en la acera, junto a las rejas, que se abrieran las puertas. En eso sale el portero y desde el atrio, molesto con todo derecho porque a él también le alcanzaba el feriado, con su vozarrón nos espeta: 

―¡Hoy no hay clase! − ¡¡¡Espabilense !!!-- ¿No se enteraron…; acaso no fueron ustedes al Luna Park ayer?-- …., y ya más calmado al comprender nuestra ignorancia, coronó la noticia diciendo: ―Terminó tan tarde que el general decretó: …..Mañana San Perón!!!.......
Y no hubo clase…

Material gráfico:
lapinguina.blogdiario.com  http://www.zonabasket.es/  picu.blogsome.com  http://www.taringa.net/  http://www.pudreteflanders.com/  y del autor.










Ante las rejas del colegio, como aquella mañana, más de medio siglo después.

4 comentarios:

  1. Populismo mondo y lirondo...Lo peor es que ahora se está reeditando en latinoamérica con nuevo cuño

    ResponderEliminar
  2. Este personaje es irreditable. Ocupa ya un lugar destacado en la antología de la demagogia a la criolla. Por supuesto estas celebridades no nacen solo con la voluntad de Dios. Son las masas las que las crean, les dan vida, les exigen, les hacen creer que son dioses y después cuando se les acaba la cuerda las olvidan y que siga el corso...

    ResponderEliminar
  3. La historia cumple ciclos y Latinoamericana es especialista en repetirlos con distintas caretas. Lamentablemente, una condición que tiene la especie humana, es la de errar, y volver a errar; repitiendo el error varias veces. No aprendemos.
    Francisco

    ResponderEliminar
  4. Francisco, atinado tu comentario. Pareciera quen fuera necesario errar todas la veces que que hiciere falta..., hasta que aprendamos. Saludos

    ResponderEliminar